Es el bob de siempre, pero en una versión más ‘chascona’ y resulta ideal para aportar volumen y movimiento a las cabelleras más lisas. Hablamos del jagged bob, una de las tendencias favoritas para este año, cuyos aires relajados y algo roqueros le dan toda la personalidad a un corte muy versátil que puede lucirse en distintos largos.
En español vendría siendo un bob ‘dentado’, pues tiene capas de distintos largos que dan ese aspecto más desordenado. El Jagged Bob está agarrando vuelo esta temporada y ciertamente, lo merece, pues resulta muy favorecedor, sobre todo para quienes tienen un cabello muy fino y, por ende, poco volumen.
Este corte vivió sus días de gloria en los años 70s y como ha sido la tónica en los últimos años, vuelve como parte del revival a la estética setentera. Para mantener el estilo más desenfadado, la recomendación es que el largo máximo llegue a la altura de los hombros, aunque su peak es a la altura de la mandíbula o clavícula. Esto también ayudará a las cabelleras finas a ganar más volumen.
El jagged bob mantiene las características de un clásico bob, pero incorpora capas a distintas alturas que logran un aspecto muy natural y además resulta muy fácil de llevar en el día a día, pues no requiere de mucho peinado o styling.
Si tu pelo no es fino ni tan liso también puedes gozar de la estética de este look: casual despeinado. Este corte, al ser desigual, aporta cuerpo y textura a la melena. Es un estilo ideal para dejarlo secar al natural y ahora que se acerca al frío, tampoco necesitarás maniobrar demasiado con el secador de pelo.
Productos clave
El jagged bob es un corte amable, no exige mucho tiempo de styling y tampoco demasiados productos. Si tienes el cabello fino, opta por un spray texturizante o un champú en seco para potenciar la textura y el volumen. Si tienes cabello con ondeado, un aceite de puntas será suficiente. Y si tienes rulos, un mousse o crema de peinar ayudará a mantener los rulos en perfecta condición.
¿Te animas a probarlo?