A lo largo de mi vida he usado chasquilla al menos cinco veces y me he arrepentido por lo menos de cuatro jajaja. Y es que el flequillo genera esa especie de atracción fatal que te hace volver a él una y otra vez, aunque el resultado no haya sido tan exitoso. Gran parte de su atractivo es que ‘viste’ mucho, complementa bien el look, rejuvenece el rostro porque le aporta volumen y tiene un aire como despreocupado-chic que a mí me encanta.
En los 80’s, cuando era niña, quise usar la chasquilla con todo ese volumen, pero nunca lo logré porque se me hacía un rulo gigante al medio de la frente. La llevé larga a la altura de las cejas cuando estaba en la universidad; años más tarde bien picoteada y extra corta en el 2010, look que hoy me parece fatal. Y durante la pandemia, por un accidente con una plancha me tuve que hacer el flequillo francés y ese me encantó. Además, con rulos también se luce un montón. El gran problema es el crecimiento, la chasquilla requiere de retoques mensuales para que se mantenga perfecta, no todos los días amanece igual y se ensucia muy rápido.
Es por eso que el flequillo postizo experimentó un alza en su popularidad a partir del año pasado. Y aunque las celebridades lo utilizan hace bastante tiempo, diría que el año pasado fue su consolidación, celebridades como Kendall Jenner, Penélope Cruz, Megan Fox y Kristen Steward fueron algunas que las lucieron en las alfombras rojas. Y de ahí, rápidamente la tendencia llegó a influencers de moda, a Tik Tok y se volvió más masiva.
¿Cuál elegir y cómo ponerlo?
Tik Tok masificó la idea de comprar flequillos por Shein, y aunque no los he probado, al ser sintéticos me parece que no se verán tan bien. Primero porque va a brillar más que el pelo natural y luego, porque no se pueden trabajar mucho. Una alternativa durable en el tiempo, debe ser de mayor calidad y creo que es mejor optar por pelo natural, pues se puede lavar, planchar y conservar de mejor manera, por más tiempo.
Otra cosa a considerar es el color. Aquí debes elegir el color más parecido al cabello, pero considera que la raíz es siempre más oscura. Ten ojo con la densidad, no pueden ser dos mechas, pero si es muy densa se va a ver pesado.
Para su aplicación, puedes hacer un pequeño medio moño y atarlo con un elástico, sobre el que irán los ganchitos de la chasquilla postiza. Esto sirve tanto si te haces una cola de caballo, como si llevas el pelo suelto. El flequillo es súper versátil, los hay rectos y también unos que tienen unos mechoncitos más largos que quedan súper naturales y se funden mejor con el pelo natural.
Los hay en tiendas especializadas y en Internet aparecen bastantes opciones. Aunque nunca he tenido uno, no descarto probar y aventurarme para esas ocasiones en que quiero un cambio de look por un ratito y para eventos especiales como ir a un matrimonio o celebración.